Chía - adelgazar de forma natural y saludable
La nueva arma milagrosa contra la obesidad se llama chía. No sólo es nutritiva, sino que reduce el apetito al tiempo que aumenta los niveles de energía. Muchos juran que la chía es un "alimento dietético de ensueño" porque sustituye a las grasas y las calorías, pero no resta sabor a las comidas y es muy saludable al mismo tiempo. La chía es un auténtico todoterreno.
Los aztecas y los incas ya conocían el poder de la chía. Utilizaban las semillas principalmente como alimento y para curar enfermedades. Hoy, la chía, una especie vegetal de las labiadas, crece sobre todo en México. Chía se traduce como "aceitosa", lo cual es acertado, porque las semillas contienen una proporción muy elevada de ácidos grasos omega-3. Pero eso no es todo. Pero eso no es todo.
Sólo 100 gramos de semillas de chía contienen 600 mg de calcio, cinco veces más que la misma cantidad de leche. La chía también aporta tres veces más hierro que las espinacas y el doble de fibra que otros cereales y semillas: sólo 2 cucharadas de semillas de chía cubren 30 % de las necesidades diarias de fibra. También contiene vitaminas A y B, potasio, boro, zinc, proteínas de alta calidad y aminoácidos esenciales.
Las semillas de chía también ralentizan la conversión de los carbohidratos en azúcar. Como resultado, la energía de los alimentos ingeridos se distribuye de forma más uniforme en el organismo, lo que se traduce en una mayor resistencia. Esto es especialmente beneficioso para las personas con problemas de azúcar en la sangre, como diabetes o colesterol alto. Además, se evitan los antojos, la grasa se almacena más lentamente y se estabiliza la flora intestinal. Las proteínas de las semillas tampoco contienen gluten, por lo que son el sustituto ideal de los cereales que contienen gluten, como la cebada, el centeno y el trigo.
Las semillas de chía pueden integrarse en la dieta sin problemas. Dado que la chía tiene un sabor muy suave, sólo ligeramente a nuez y relativamente neutro, no modifica el sabor real de los alimentos. Sin embargo, con la adición de chía, su valor nutritivo se enriquece enormemente, al tiempo que la cantidad de calorías se reduce hasta la mitad. Combinadas con agua, las semillas de chía forman una masa gelatinosa que proporciona una rápida sensación de saciedad y puede añadirse a una gran variedad de platos. Por ejemplo, pueden añadirse a aliños, salsas y batidos o servir de útil complemento al pan, los pasteles y el muesli.
Las semillas de chía son pequeños ayudantes saludables con grandes beneficios para la figura y la salud.
Semillas de chía: ¿milagro para la salud o moda peligrosa?
Desde hace unos años, las semillas de chía están en boca de todos. Elogiadas como un superalimento, se dice que hacen maravillas. Pero, ¿qué hay realmente detrás de todo este revuelo?
Las semillas de chía son pequeños granos negros o blancos originarios de México que ya utilizaban los aztecas como alimento y remedio. Hoy son populares como complemento de batidos, mueslis o yogures, o como base de puddings y productos horneados.
Las semillas de chía son ricas en fibra, proteínas, ácidos grasos omega-3, antioxidantes y minerales como el calcio y el magnesio. Por eso se dice que no sólo facilitan la digestión, sino que también refuerzan el sistema cardiovascular, regulan los niveles de azúcar en sangre y refuerzan el sistema inmunitario.
También se dice que las semillas de chía ayudan a perder peso, ya que su gran capacidad de hinchamiento proporciona una sensación de saciedad duradera y puede evitar así los antojos. Sin embargo, hay que tener cuidado de no consumir demasiadas semillas de chía, ya que pueden tener efectos negativos si se consumen en exceso.
Si desea comprar semillas de chía, asegúrese de elegir calidad ecológica para garantizar que las semillas no estén contaminadas con pesticidas u otras sustancias nocivas.
Al remojar las semillas de chía, siempre deben empaparse en suficiente agua o líquido, ya que de lo contrario se hinchan en los intestinos y pueden provocar problemas digestivos. También en este caso es importante elegir la cantidad adecuada y no excederse.
Las semillas de chía pueden prepararse de muchas maneras, por ejemplo como pudin, en yogur o como ingrediente en productos horneados. También pueden utilizarse como ingrediente en platos salados.
Sin embargo, también existen algunos posibles efectos secundarios de las semillas de chía, como flatulencias, dolor abdominal o reacciones alérgicas. Las personas con inflamación intestinal también deben evitar las semillas de chía, ya que pueden agravar los síntomas.
En resumen, puede decirse que las semillas de chía son bastante saludables y ofrecen muchos beneficios si se utilizan correctamente. Sin embargo, también hay que prestar atención a los posibles efectos secundarios y no tomar demasiadas semillas a la vez. Si desea integrar las semillas de chía en su dieta, lo mejor es hacerlo lenta y gradualmente e informarse de antemano sobre los posibles riesgos.